miércoles, 9 de noviembre de 2011

Ojos de Cielo





Trabajaba duro en las montañas recogiendo troncos y amontonándolos en pilas, sometida a malos tratos constantes por parte de su dueño, pero aún así ella seguía cumpliendo diariamente.
Un día a su amo se le fue la mano, la maltrató más de la cuenta y un golpe certero la hizo perder un ojo. A este le gustaba demostrarle quien era quién mandaba allí.
Se quedo preñada, dos largos años de gestación, en los que el trabajo y los golpes no aflojaban. Ella, que aun no tenía nombre, decidió parir en la montaña, se escapó y para allá se fue. La suerte seguía sin estar de su lado. Al parir el pequeño elefante que llevaba dentro cayó mal, rodo ladera abajo, se golpeó y murió en el acto.

             

Después de dos días vagando por las montañas la encontraron y las represarias fueron grandes, había perdido un pequeño elefante que le serviría a su amo para tener algo nuevo a lo que golpear, explotar, exprimir y las consecuencias fueron peores que nunca. La golpearon sin fin, y ella en su último aliento saco fuerzas de flaqueza,  y por primera vez se revolvió y con un veloz movimiento de su trompa alcanzó al que tanto tiempo la hizo sufrir. No fue suficiente para acabar con él, y a lo mejor tampoco fue buena idea, o quizás sí. Este, cogió un hierro y se lo clavo en el ojo que le quedaba, dejándola ciega e inútil para todo.
Ya no servía para trabajar, quién iba a querer a una elefante ciego. Fue mal vendida a Lek, que había montado  una pequeña reserva para elefantes maltratados en Tailandia.

           

Lo primero que hizo Lek, fue ponerle nombre: Jokia, “Ojos de cielo” en thai, y presentarle a la manada. Otros como ella, algunos también maltratados y otros mutilados por obligarles a trabajar en zonas minadas, algunos también nacidos en el parque, hasta un total de 37.




Fue bien aceptada por el grupo, especialmente por Mae Perm, otra elefante que padeció tanto como ella, pero fue recuperada a tiempo antes de sufrir graves daños. Ahora es su guía, su amiga, sus ojos, no se separan, comen, duermen, se bañan, caminan juntas.





Por fin la vida sonríe a Jokia, no tiene ojos pero sí una nueva expresión en su cara. Mejor otros 30 años más aquí ciega, que con ojos y seguir viendo el infierno.




4 comentarios:

  1. Hola chicos, como siempre ..sin palabras.Fijaros que casualidad qye hace unos dias vi en un programa de la cuatro a un tio que vive en Tailandia ( Frank de la Jungla) asi se llama el programa y estaba filmando a unos desalmados y haciendo lo que acabais de contarnos.Por lo visto hay una parte del pais que lo hace y todos tan pichi, que pena verdad? pero supongo que es peor verlo en vivo en y en directo.Bueno espero que sigais viendo con nuestros ojos vale? Un besazo.Cuidaros.La Otero.

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  2. Jo!!como pasa el tmpo,os leo,os sigo,disfruto con cada nueva pubicación........y un dia te sientas a escribir,lees los comentarios de la gente y piensas:Joder hace 1 mes q no les escribo,se me ha pasado el cumple de Gustavo,no les he contado q he vuelto a la vida laboral,q a mi tbm me llegó esa paz laosiana q tbm describiais.....pero todo eso se queda pqño cuando lees historias como la de Jokia,asi somos,asi de crueles.Hace una semana la gente os daba lo mejor de ella,sonrisas y después de 7 dias os encontrais con historias q sacan lo peor de ti...la rabia,el odio.
    Seguir disfrutando de lo bueno y lo malo,esto es una experiencia UNICA!!!!un bico

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  3. Muy buenas chavales, me gusta veros tan felices, disfrutad por todos los que os seguimos en la distancia . Por cierto, me ha conmovido mucho la historia de Jokia, espero que de aquí en adelante la vida le regale muchas sonrisas como las vuestras. Un besazo muy fuerte, Beatriz y Francis.

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  4. La Otero, sinceramente ha sido maravilloso sentir todas estas historias tan de cerca. Muy bonito.
    Gema C, muy bonito olvidarte del cumpleaños de tu primo, jejeje....
    Bea y Francis, ya ha pasado todo Toledo a ver el robot?????? Mantenednos informados.

    Beostes y Gracias.

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