Venga, por una vez y ahora que estamos acabando no vamos a ser cutres, y en lugar de emplear todo el día en regresar a Bali entre un pequeño bote, un bemo, el ferry y otro bemo mas hasta Ubud, como hacen los locales, vamos a tirar la casa por la ventana y vamos a pillar el “fastboat” que nos deja en Bali en una hora, ¡en qué hora!.
La mañana se ha levantado lluviosa y ventosa y el mar cabreado, pero desde la oficina nos dicen que el bote zarpara a la hora prevista, que la cosa está controlada. A medida que nos alejamos de las Gili la cosa se va poniendo peor, olas de más de tres metros engullen literalmente la embarcación de no más de 20 m de eslora. Otras veces subimos y subimos para luego caer de golpe al mar, balanceos brutales que hacen pensar que no tardaremos mucho en volcar. Dentro cunde el pánico y el que no llora está echando la pota. Según nos vamos acercando a la costa, el mar se va calmando y la tranquilidad regresa. Lo que iba a ser un placentero y cómodo viaje de una hora se ha convertido el un suplicio de más de dos horas y media, y es que no hay nada como ir de cutre.
Bali, nada más llegar se aprecia, mucho más turística que todas las demás, mucho más preparada y culturalmente más rica. Hay más turistas aquí que en toda Indonesia, pero curiosamente, y sobre todo en el interior, mantiene sus raíces y costumbres. Aquí el hinduismo gana claramente al cristianismo y al islamismo moderado de Sumatra y Java, y al más arraigado en Lombok, una cultura más vistosa que las otras, dioses más llamativos y demonios que custodian cada templo, mas de 20.000 en la isla, en cada casa uno y luego los grandes, los Pura, con sus característicos tejados de paja en forma de pirámide, refugios de los dioses cuando bajan a la tierra.
Es prácticamente imposible venir a Bali y no coincidir con alguna ceremonia balinesa donde las ofrendas a los dioses se convierten en un pasacalles de colores.
Para asistir a estas ceremonias y poder entrar a los templos hay que vestir de forma apropiada, y como en alguna hemos estado, nos han plantado el Sarong y el pañuelito que nos queda la mar de mono.
Yo no es por meter el dedo en la llaga, pero solo os quedan 3 dias,que seguro que no os habeis dado cuenta, asique disfrutad del solecito,las playas,las gentes....en fin DISFRUTAD . Os esperamos. Un besazo .La Otero.
ResponderEliminarMona!!!! Pues para no gustarte meter el dedito en la llaguita lo haces muy bien!!!! jajajaja....
EliminarBesitos.